“Buscad al Señor” es el título del Catecismo de Adultos aprobado por la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española de noviembre de 2022 y presentado un año después. Fruto de un intenso trabajo por parte de la Comisión para la Evangelización, Catequesis y Catecumenado, con este catecismo se completan los catecismos para todos las etapas. Francisco Julián Romero Galván, director de esta comisión, presenta en Vida Nueva las principales novedades de este documento de fe viene a ser un instrumento que los obispos ofrecen al pueblo de Dios para la tarea de la catequesis y el catecumenado bautismal. “Hoy, a pesar de la secularización, son muchos los que llaman a las puertas de la Iglesia pidiendo que se les acompañe en un proceso para hacerse cristianos o para revitalizar la fe que un día recibieron y no está madura o la perdieron y desean volver a ella”, señala.
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Camino de fe
PREGUNTA.- ¿Qué supone la publicación de un catecismo para adultos?
RESPUESTA.- Con el Catecismo para adultos “Buscad al Señor” queremos ofrecer a la Iglesia de España un documento de fe que sirva de instrumento para evangelizar y catequizar a los adultos. Los obispos españoles quieren promover la catequesis con adultos en cada comunidad y este texto quiere ayudar a los sacerdotes y catequistas a que inicien en la vida cristiana mediante un proceso de fe y conversión.
P.- ¿Quiénes son los adultos a los que va dirigido?
R.: Los destinatarios del Catecismo son aquellos adultos que piden a la Iglesia el Bautismo (en España estamos hablando de unos 3.000 cada año) y que esta los debe acompañar para que pongan los cimientos de su vida cristiana y accedan al don de la fe. También son destinatarios los adultos que, aunque bautizados en su infancia, no fueron suficientemente evangelizados o se alejaron de la fe y ahora desean volver al seno de la Iglesia. Tanto unos como otros deben revitalizar la fe por medio de un proceso de iniciación cristiana que el Catecismo le marca siguiendo las indicaciones del RICA (Ritual para la iniciación cristiana de adultos).
Más que la catequesis
P.- Junto al Catecismo “Buscad al Señor” se presenta una guía para la catequesis y una carpeta de celebraciones.
R.- Ciertamente es así. Hablamos de un pack. El catecismo es para la catequesis y, por ello, precisa de unas indicaciones para esos encuentros catequéticos que quedan recogidos en la guía para la catequesis. Además, el RICA plantea que el itinerario de iniciación cristiana de adultos no se basa solamente en catequesis, sino que hay un recorrido de celebraciones que marcan el proceso interior que está viviendo quien desea hacerse cristiano o pretende revitalizar su fe. Por eso esta carpeta con las celebraciones precisas e imprescindibles que se han de realizar a lo largo del proceso catequético.
P.- El título está muy en sintonía con los materiales renovados que hay para la infancia, adolescencia y juventud, ¿por qué “Buscad al Señor” para los adultos?
R.- Este es el Catecismo que completa el itinerario que ha realizado la Conferencia Episcopal Española. Con “Buscad al Señor” como catecismo de adultos ya todos los sectores de edades tienen su documento de fe para iniciarse en la vida cristiana. Ahora bien, el título de “Buscad al Señor” viene marcado en la portada. Aparece Juan el Bautista indicando al apóstol san Andrés que siga a Jesús que es el realmente importante y san Andrés se lo comunica, al mismo tiempo, a su hermano Simón Pedro. Representa cómo en medio del mundo (el relato aparece fuera, en los entresijos de la vida) los hombres reciben el anuncio de Jesucristo para que le sigan y sean sus discípulos, y ellos, al mismo tiempo, se han de convertir en anunciadores de la buena noticia que están recibiendo porque esta les está transformando su vida.
P.- El subtítulo “Catecismo para el catecumenado de adultos y para la revitalización cristiana”, ¿es algo más que una intención?
R.- Es la intención, catequizar e iniciar en la fe a los que están haciendo el catecumenado para recibir el bautismo y para aquellos que, ya bautizados, desean revitalizar en ellos la vida cristiana. Cada tema desea, con un lenguaje adecuado a la persona de hoy, suscitar preguntas, inquietudes, responder dudas… con el fin de afianzar la fe y la conversión de los hombres y mujeres que viven en el mundo de hoy y de la manera de cómo se plantean la vida. Responder a sus preguntas desde la buena noticia de Jesús es una de las pretensiones de este catecismo, además de ponerlos en relación con el pensamiento, la cultura… en la que están insertos.
Recuperar el catecumenado
P.- La catequesis ha vivido una evolución fascinante en las últimas décadas, ¿cuál es el papel de un catecismo de adultos en este contexto?
R.- Ciertamente que la Iglesia está empeñada en realizar una evangelización seria y constante con el fin de responder al mandato misionero de Jesús de “id al mundo entero y anunciad el Evangelio”. La Iglesia existe para evangelizar, así nos lo decía el papa Pablo VI. Desde el Concilio Vaticano II hasta nuestros días ha habido un empeño por recuperar el catecumenado bautismal que se realizaba en los comienzos de la Iglesia (eso sí, adaptándolo a nuestro tiempo) y la catequesis con adultos ya bautizados. Ojalá que, en cada parroquia, igual que está institucionalizada la catequesis con niños y con adolescentes, se haga con los adultos. Esto renovará las parroquias porque se incorporarán muchos nuevos cristianos. Para responder a ello nace el Catecismo “Buscad al Señor”. Hay muchos adultos que buscan a Dios y desean emprender el aprendizaje de la vida cristiana desde un proceso catequético reglado y verdadero.
P.- Yendo a los contenidos concretos, ¿cuáles son los elementos clave de la catequesis de adultos?
R.- Un adulto busca a Dios porque surge el deseo en su corazón después de diferentes experiencias vitales. En su realidad existencial se pregunta, duda, se inquieta, desea responder a lo que vive, sueña… En esos momentos es imprescindible que puedan tener una relación con un cristiano que le lleve a un encuentro con Cristo, a una experiencia significativa con el Señor. De ese encuentro surgirá una amistad y una decisión de querer seguir al Señor, para ser su discípulo, amarle, seguirle e imitarle. A todo ello la Iglesia enseña por medio de la catequesis de adultos. En ese proceso se ponen los cimientos de la vida del discípulo de Cristo y se madura en la fe y en la conversión. Es un itinerario espiritual, el Espíritu Santo es el que realiza su obra por medio del testimonio de los catequistas y de lo que se le transmite en el catecismo.
P.- ¿Qué tipo de catequistas demanda este catecismo?
R.: El catequista debe ser un creyente enraizado en Cristo, que vive su fe en la comunidad cristiana, maduro humana y espiritualmente, que sabe trabajar en equipo, que tiene un fuerte deseo de llevar el mensaje del Señor a otras personas que su comunidad le entrega. Debe estar suficientemente formado como para saber dar razón de su fe cuando los catequizandos o catecúmenos se la pidan. El catequista es quien acompaña.