El Papa ha recibido hoy en audiencia a una delegación de la Federación Nacional Italia-China con motivo del décimo aniversario de su nacimiento. Durante su discurso, Francisco ha subrayado la labor de esta organización que “apoya múltiples iniciativas que pretenden promover el diálogo entre Italia y China, abordando los desafíos relacionados con la integración cultural, la educación y los valores sociales que deben compartirse”.
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“Os expreso mi agradecimiento y os aliento a proseguir el camino emprendido y a perseguir estos objetivos con generoso compromiso, para que el conocimiento mutuo entre las comunidades italiana y china pueda contribuir a aumentar la aceptación mutua y el espíritu de fraternidad”, ha dicho el Papa.
Acróbatas de la paz
A continuación, Francisco agradeció a la Academia de Artes Marciales Chinas de Vercelli las danzas folklóricas inspiradas en el León y el Dragón, que “en la tradición del noble pueblo chino pretenden expresar el deseo de que el Año Nuevo sea fructífero y lleno de bien”.
“Los acróbatas, como sabemos están especializados en ejercicios y espectáculos audaces, digamos de ‘alto riesgo'”, ha apuntado el Papa. “Observando esta danza acrobática”, Francisco ha deseado a todos que “sepan arriesgarse siempre en el camino del diálogo, convirtiéndose en acróbatas de la paz y de la fraternidad”.
