Las cristianas afroamericanas Michele Jenkins y Stephanie Moore sintieron una profunda conmoción en 2020, cuando un policía asfixió a George Floyd mientras gritaba: “No puedo respirar”. Aquello elevó el movimiento Black Lives Matter a clamor mundial. Ante las movilizaciones y revueltas populares que pusieron patas arriba todo el país, estas dos mujeres se preguntaban qué más podían hacer.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- PODCAST: Escuchar para sanar
- Regístrate en el boletín gratuito
Los negros son diez veces más pobres y la lucha por su liberación es imprescindible en el compromiso cristiano, pero, en una entrevista con la periodista Adelle Banks en ‘Religion News Service’, Michele y Stephanie dijeron que querían ayudar mucho más a que la gente pudiera de verdad respirar. Las rodillas hincadas en el suelo de millones de personas anhelan una liberación mucho más profunda: la injusticia social no es solo una causa de recursos y derechos, sino un problema de cruz y resurrección.
Decididas a mover espíritus y corazones, estas dos mujeres fueron uniendo a un amplio colectivo de referentes populares del mundo cristiano afroamericano –cantantes, científicos, deportistas, profesionales, desarrolladores comunitarios, líderes como la pastora Bernice King, hija de Martin Luther King, o Thelma Daley, presidenta del Consejo Nacional de Mujeres Negras– y les pidieron que compusieran meditaciones esperanzadoras basadas en su experiencia de la Biblia. Así nació el proyecto The Breathe Life Bible. Los pasajes bíblicos están intercalados con estas meditaciones en las que la Palabra es la mejor compañera de camino. Propone que nos liberarnos para poder respirar hasta llenar el alma de aire de vida (cf. Gn 2, 7).
De corazón a corazón
Es un buen ejemplo de creatividad pastoral, que une fe y justicia. Meditaciones de corazón a corazón. Tan solo se trata de ayudar a respirar. Necesitamos liberarnos de la contaminación política, capitalista, consumista, ideológica, banal, y respirar juntos aire puro. Aunque sea todos juntos una sola vez. Eso cambiaría casi todo.