Este sábado 24 de febrero tuvo lugar una boda en El Campillo (El Escorial), una finca privada utilizada para banquetes, pero que también cuenta con una capilla, por lo que, pidiendo la autorización expresa, puede acoger enlaces católicos. Sin embargo, allí ha celebrado su boda una pareja gay sin que el Arzobispado de Madrid tuviera constancia.
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“No fuimos informados ni consultados sobre la posibilidad de realizar dicha celebración siendo un acto unilateral de la finca que tendrá efectos canónicos”, informa, “con el deseo de evitar confusión”, la propia Archidiócesis en un comunicado. Asimismo, recalca que “en ningún caso está permitido realizar un matrimonio civil dentro de un recinto religioso”.
Vídeo con música de Hakuna
En el comunicado, explican que “las ermitas dentro de fincas privadas no tienen autorización para realizar celebraciones religiosas públicas, a puerta abierta, y con una finalidad comercial”. De hecho, “en su momento fueron concebidas únicamente para uso privado devocional de la familia propietarios de la misma y en ningún caso para ser ofrecidas como un servicio opcional lucrativo de una empresa dedicada a la organización de eventos sociales”, agregan.
El enlace ha encendido las redes sociales entre partidarios y detractores de este unión en la capilla dedicada a la Santísima Trinidad. Los vídeos compartidos por los invitados en redes sociales muestran a los jóvenes con una canción de Hakuna, el grupo de música que triunfa entre muchos jóvenes católicos, aunque estos no sonaran durante la celebración.