Guerras, inmigración, hambre, maltrato de la tierra, atentados contra la vida… He aquí algunas de las grandes preocupaciones del papa Francisco y de toda persona de buena voluntad. Preocupaciones que nos llaman a tomar partido por la paz, por la vida, por todo aquello que contribuye al bien de las personas. De ahí la oportunidad de la declaración del Dicasterio para la Doctrina de la Fe ‘Dignitas infinita sobre la dignidad humana’