Redactor de Vida Nueva Digital y de la revista Vida Nueva

¿Es el papa Francisco homófobo y machista?


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La palabra

Hace tres semanas el papa Francisco se reunía con la Conferencia Episcopal Italiana que celebraba su Asamblea Plenaria semestral. Ya es habitual que el pontífice tenga un diálogo a puerta cerrada, sin discursos prefijados, del que trascienden algunas ideas o detalles como el regalo que lleva el Papa, la oración o el libro que les recomienda. Pero en la del 20 de mayo, cuando Papa abordó la no conveniencia de aceptar a candidatos homosexuales en los seminarios alguien contó más detalles.



Durante su intervención, el diario ‘La Repubblica’ atribuye a Francisco la expresión: “Hay demasiado mariconeo (“frociaggine”) en ciertos seminarios”, citando a fuentes episcopales como las responsables de filtrar este comentario literal. ‘Il Corriere della Sera’, que recoge esta misma frase, relata cómo fue recibida por su auditorio con “risas incrédulas”, en tanto que “era evidente que el Papa no era consciente de lo ofensiva que resulta esa palabra en italiano”. Por otro lado, habría una tercera versión que no coincide con lo expresado por ‘La Reppublica’ y ‘Il Corriere’, que es un blog digital sensacionalista que fue quien primero desveló el uso de “frociaggine”. Se trata de Dagospia, que llega a poner en boca de Francisco lo siguiente: “En la Iglesia hay demasiado aire de ‘frociaggine’”. Según este medio, Francisco habría instado a los obispos a “sacar de los seminarios a todos los maricones, también los que son solamente semi-orientados”.

El papa Francisco, en la audiencia del 3 de mayo de 2024

El papa Francisco, en la audiencia del 3 de mayo de 2024.

La disculpa

“El Papa nunca tuvo la intención de ofender o expresarse en términos homófobos y pide disculpas a quienes se sintieron ofendidos por el uso de un término referido por otra persona”. Con estas palabras el Vaticano respondió a las palabras virales de Francisco con los obispos. En un comunicado oficial se insistía una vez más que “¡en la Iglesia hay lugar para todos, para todos! Nadie sobra, hay sitio para todos. Tal como somos, todos nosotros”.

Los primeros análisis más ponderadas, destacaban que esta postura de Francisco, más allá del  comentario, va en la línea de la praxis y la normativa de la Iglesia al respecto. Así lo establece la Instrucción elaborada por el Vaticano en 2005 y confirmada por él mismo en 2016. “La Iglesia no puede admitir al seminario y a las órdenes sagradas a quienes practican la homosexualidad, presentan tendencias homosexuales profundamente arraigadas o sostienen la así llamada cultura gay”, puede leerse en el texto.

Y sobre el rechazo a los homosexuales el jesuita James Martin se dejaba fotografiar siendo bendecido por el Papa poco después. Junto a la imagen de ese momento, escribía en sus redes sociales que “con su permiso para compartir esto, el Santo Padre dijo que ha conocido a muchos seminaristas y sacerdotes buenos, santos y célibes con tendencias homosexuales”. Pero eso no es todo, Martin confiesa que el pontífice “una vez más, confirmó mi ministerio con las personas LGBTQ y mostró su apertura y amor por la comunidad LGBTQ”. “También fue una gran alegría recibir su bendición en el 25 aniversario de mi ordenación sacerdotal”, añade el jesuita en su post.

Los lobbies

La semana pasada, en un nuevo encuentro a puerta cerrada del Papa con los sacerdotes de Roma, Francisco volvió a ser noticia por filtrarse de nuevo la misma palabra que con los obispos. La Oficina de Prensa de Vaticano en un comunicado explicaba que el Papa había hablado del peligro de las ideologías en la Iglesia y volvió al tema de la admisión en los seminarios de personas con tendencias homosexuales, reiterando la necesidad de acogerlas y acompañarlas en la Iglesia así como “la indicación prudencial del Dicasterio para el Clero sobre su entrada en el seminario”.

Además, Francisco también habría reiterado que si un chico tiene tendencia homosexual “es mejor no dejarle entrar en el seminario”. “Son buenos chicos”, habría añadido el Papa, “pero con esta tendencia es mejor no hacerlo”. En cualquier caso, parece que, según el contexto de la pregunta el Papa no se refería directamente a las personas homosexuales, sino a una doble vida de algunos sacerdotes y empleados del Vaticano, que podrían utilizar el sacerdocio para esconder su homosexualidad. Y es que, tal como señala Ansa, en varias ocasiones el Papa se ha mostrado muy abierto hacia las personas homosexuales, pero, al mismo tiempo, se ha expresado muy claramente contra los “lobbies”, y este sería el sentido de las palabras de ayer. Algo que por cierto ha comentado varias veces.

Le pasa a Francisco que los pasos significativos producidos durante su pontificado con el mundo LGTBI parecen verse comprometidos en la vorágine de los titulares y tertulias que no son capaces de ir más allá de una palabra o expresión desafortunada. A veces la ideología con la que se analizan opiniones o visiones de fondo de la Iglesia, que no pretenden contentar a ningún lobby o ideología pasajera hacen que se presente a un Bergoglio que lo que dice de algunos temas, como el feminismo o la mujer en la Iglesia, lo hace por puro postureo… aunque los hechos del día a día demuestran que la realidad va por otro lado. Y que a veces el perdón se pide de corazón.