El periódico The Times de Londres recoge este miércoles, 3 de julio, entre las cartas de sus lectores una petición de diferentes personalidades británicas de la política, los negocios, las artes y los medios de comunicación al papa Francisco para que reconsidere toda restricción de la liturgia preconciliar según el misal de 1962, como restableció parcialmente Benedicto XVI.
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“Imploramos a la Santa Sede que reconsidere cualquier nueva restricción al acceso a este gran patrimonio espiritual y cultural”, se lee en el manifiesto que firman, entre otro, el conocido compositor de musicales Andrew Lloyd Webber, el creador de la serie ‘Downtown Abbey’ Julian Fellowes, el historiador Tom Holland o la princesa María Cristina de Reibnitz –casada con un nieto del rey Jorge V–. esta carta surge a partir de los rumores extendidos en blogs y agrupaciones tradicionalistas sobre una posible prohibición más estricta de la forma extraordinaria de la liturgia, algo que ha desmentido, por ejemplo, el diario La Croix.
El “indulto de Agatha Christie”
La idea de la carta no es nueva. Ya en 1971, The Times acogió una carta de más de 50 escritores y artistas pidiéndole a Pablo VI que frenase cualquier reforma de la misa tradicional con el misal tridentino. Una de las firmas más sonadas fue la de la escritora Agatha Christie, que rubricaba el escrito junto a otros autores de su ámbito como Graham Greene, Robert Graves o W. H. Auden. Entre los franceses firmantes estaban Robert Bresson, François Mauriac y Jacques Maritain. A estos se unieron, desde el ámbito hispano, Salvador de Madariaga, María Zambrano, Andrés Segovia y Jorge Luis Borges.
Los firmantes, ratificaban, hacían un llamamiento a “la Santa Sede sobre la apabullante responsabilidad en la que incurriría en la historia del espíritu humano si se negara a permitir la subsistencia de la Misa Tradicional”. Surgió entonces el conocido “indulto de Agatha Christie”, un permiso papal para que en algunas iglesias de Inglaterra y Gales se pudiera seguir utilizando el rito anterior y mantener la misa ‘ad orientem’.
