Jorge García Cuerva, titular de la arquidiócesis de Buenos Aires, presidió la Misa de Acción de Gracias por los 85 años de la sede de la Santísima Trinidad como primada de la Argentina. A partir del próximo 7 de septiembre, se trasladará a la primera jurisdicción eclesiástica del país, la Iglesia de Santiago del Estero.
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Estuvo acompañado por el nuncio apostólico Miroslaw Adamczyk; el cardenal Mario Poli, emérito de Buenos Aires; el presidente de la Conferencia Episcopal Argentina, Oscar Ojea; y el próximo arzobispo primado, Vicente Bokalic Iglic, cm, titular de la diócesis santiagueña.
El nuncio apostólico leyó el documento a través del cual se desvincula a Buenos Aires del título de Primada por disposición del papa Francisco, y eleva a ese grado a la sede episcopal de Santiago del Estero, a partir de ahora con categoría arzobispal. Continuará siendo sufragánea de la arquidiócesis de Tucumán. Esta Bula Pontificia se hará efectiva el primer sábado de septiembre.
Santiago del Estero, la más antigua
En la homilía, García Cuerva señaló que en esta Eucaristía celebran el traslado de la sede del título primacial de Buenos Aires a Santiago del Estero. Este título de Iglesia primada se le concede por ser la primera fundada en la Argentina, en 1570. “Elegimos la verdad histórica: Santiago del Estero es la diócesis más antigua, por eso es la primera… Elegimos la información, los datos históricos, y no la pseudo interpretación de algunos”, indicó.
Agregó que eligen también la fraternidad, más allá de que algunos vieron aquí una intención de desvalorizar a Buenos Aires. No se va a pelear Buenos Aires con el interior… “Somos hermanos, somos Iglesia, elegimos la fraternidad, elegimos la cultura del encuentro, elegimos tender puentes, en definitiva, elegimos a Jesús, elegimos entre todos construir su proyecto de vida“.
Con respecto al Evangelio, destacó que las palabras de Jesús interpelan, cuestionan, resultan duras y difíciles de practicar. Todos tenemos un gran desafío a partir del mensaje de Jesús: que nos perdonemos los unos a los otros siempre, sin límites; que amemos al enemigo. Expresó que a Jesús le interesa cumplir la misión del Padre y ser fiel al proyecto del Reino. “… Aunque la gente hoy lo abandona, Jesús sigue insistiendo en que Él es el Pan de Vida que viene a saciar el hambre más profundo del corazón humano. La Eucaristía es la respuesta de Dios al hambre profundo que tiene nuestro corazón”.
Remarcó que el Evangelio llama a elegir, y estimó como muy difícil para Pedro sostener el sí en el momento de la Pasión, de hecho lo negó tres veces. “Qué difícil también es para nosotros sostener las elecciones de la vida”, aseveró.
Concluyó comentando: “Que este paso en el que elegimos la verdad histórica, que este paso en el que elegimos la fraternidad, sea un paso también de todos elegir una vez más la fidelidad a Jesús y su proyecto del Reino”.
Al finalizar la celebración, se descubrió una placa conmemorativa con los nombres de los arzobispos primados de la Argentina, desde 1936.