Desde el 8 de octubre de 2023, la escalada de tensiones regionales se ha ido extendiendo por Oriente Medio. La crisis en Tierra Santa se ha intensificado, y el conflicto alcanza ahora al Líbano. El 17 de septiembre causó más de 5.275 heridos y 589 muertos. Sólo del 23 al 25 de septiembre ha habido 610 muertos (incluyendo 50 niños, 94 mujeres y 4 médicos) y al menos 2.000 heridos más. Las infraestructuras del sur del Líbano han quedado devastadas, dejando a miles de civiles sin hogar y a los residentes con acceso limitado a servicios esenciales como el agua, la electricidad y la asistencia sanitaria.
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En este contexto, Caritas Líbano está centrada en la distribución de ayuda crucial a la población libanesa. Esto incluye cuidados médicos de emergencia, agua potable y apoyo a las familias desplazadas. A pesar de la violencia en curso, siguen comprometidos en atender las necesidades inmediatas de los afectados, ayudando a las comunidades a encontrar la estabilidad y comenzar la reconstrucción.
“Líbano se ha enfrentado a años de dificultades humanitarias, debido a los retos socioeconómicos y a la inseguridad, especialmente en el sur, al tiempo que acoge a muchos refugiados sirios, que siguen necesitando asistencia crítica”, subrayan desde Cáritas Internationalis. “Desde octubre de 2023, las tensiones regionales han desplazado a casi 90.000 personas del sur del Líbano, aumentando la necesidad de refugio, alimentos y ayuda con dinero en efectivo”.
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Ayuda urgente a los desplazados
Asimismo, la organización advierte que “la reciente violencia ha causado aún más pérdidas de vidas entre la población civil, así como otros heridos y ha obligado a la gente a abandonar sus hogares. Más de 21.000 personas se encuentran ahora en refugios temporales, con miles más desplazadas y buscando seguridad, dondequiera que puedan encontrarla. Se han abierto escuelas para acoger a los desplazados internos, pero hay una grave escasez de recursos esenciales como agua, alimentos, colchones y mantas”.
Y es que, desde que comenzó el conflicto, “Caritas Líbano ha estado ofreciendo ayuda urgente a los desplazados. Esto incluye consultas médicas, medicamentos, vacunas, fisioterapia, cuidados de enfermería y servicios de protección como asistencia jurídica, refugio seguro y acceso a la educación”. Sin embargo, la ayuda básica, como dinero en efectivo, kits de alimentos, suministros de higiene y kits de preparación para el invierno, sigue siendo fundamental.
“Hasta el 29 de septiembre, Caritas había asistido a 24.355 desplazados, con un refugio, distribuyendo 79.233 comidas calientes, 821 kits de higiene, 4.427 prendas de vestir, 1.190 kits de alimentos, 800 mantas, 1.034 unidades de agua y diversos servicios sanitarios”, subrayan.
A medida que crece la demanda, Caritas Líbano está trabajando a plena capacidad para cubrir las necesidades urgentes de los afectados. A pesar de la financiación predispuesta y los acuerdos, los recursos siguen siendo limitados. Siguen ofreciendo comidas calientes, paquetes de alimentos, artículos de primera necesidad no alimentarios, apoyo para refugios y servicios médicos, a través de los Centros de Atención Primaria y las Unidades Médicas Móviles. Cientos de voluntarios de Caritas participan activamente en la distribución de ayuda y organizando refugios para los desplazados por la crisis.
En este sentido, Caritas Internationalis se está coordinando activamente con Caritas Líbano y otros colaboradores mundiales para mantenerse al día sobre la evolución de las necesidades y dirigir respuestas específicas, para los afectados por el conflicto. “En estos momentos críticos, su apoyo es esencial para llevar asistencia y esperanza a las personas afectadas por esta crisis devastadora”, apunta la organización.
La acción de Cáritas española
Por su parte, Cáritas Española ha decidido movilizar 100.000 euros ante la crisis de personas desplazadas en Líbano a raíz de la escalada del conflicto en Tierra Santa. Con estos fondos pretende dar respuesta al llamamiento de emergencia lanzado el pasado 27 de septiembre por Cáritas Líbano en coordinación con Caritas Internationalis.
“El objetivo es apoyar a los desplazados internos y a las personas en riesgo de desplazamiento, afectados por el conflicto en curso en las fronteras meridionales, para satisfacer sus necesidades agudas en términos de atención sanitaria, protección y necesidades básicas”, explica Pablo Reyero, coordinador del equipo de Oriente Medio del área de Cooperación Internacional de Cáritas Española.
El proyecto tiene como objetivo proporcionar servicios de atención médica de calidad a unas 4.000 personas en la región del Sur de Líbano (una de las ocho gobernaciones en la que está dividida el país) a través de dos centros de atención primaria y tres unidades móviles médicas. Con estos recursos se pretende prestar 2.764 consultas médicas y 432 pruebas diagnósticas, facilitar 5.000 cajas de medicamentos que cubren afecciones agudas y crónicas y cubrir gastos de hospitalización a 100 personas vulnerables.
Entre la ayuda de emergencia se incluye también la provisión de alimentos, kits de higiene, ayuda monetaria en efectivo, atención psicosocial y refugio seguro para mujeres y menores de edad víctimas de violencia de género o en situación de riesgo.
