El cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, dibujó esta mañana el perfil de los colegios eclesiales del presente y del futuro. “No se trata de adoctrinar”, subrayó el también vicepresidente de la Conferencia Episcopal Española en la apertura la I Asamblea de Titulares y Directores de Escuelas Católicas de Madrid (ECM), que se celebra en la sede del Seminario Conciliar de Madrid.
- WHATSAPP: Sigue nuestro canal para recibir gratis la mejor información
- Regístrate en el boletín gratuito y recibe un avance de los contenidos
El purpurado expuso que “no hay escuela católica si no hay católicos, pero no solo católicos que acuden a la escuela católica, no podemos hacer de nuestras escuelas un club de fans”. En esta misma línea, expuso que los centros de la Iglesia no pueden ser lugares “la gente católica a refugiarse”. El arzobispo madrileño reivindicó que “nuestra primera presencia, que nadie nos la puede quitar y vamos a defender a corazón abierto, es el Evangelio”. “Es la base, no una ideología ni partido político, que descubre la dignidad de cada persona”, apuntó justo después.
Vanguardia de la misión
Cobo aplaudió la labor de los docentes cristianos. “Estáis en la vanguardia de la misión de la Iglesia”, ensalzó por su entrega, no solo con los niños, sino con las familias. En ese sentido, apoyó la necesidad de “dar respuesta” a los “clamores” de este tiempo, como la tentación de educar únicamente para el éxito personal, vivir en “un mundo con un pensamiento muy débil” o un contexto antropológico “donde Dios no tiene sitio”. “No se trata de transmitir conocimientos sino de descubrir la dignidad de cada persona”, subrayó.
José Cobo, en la Asamblea de Escuelas Católicas de Madrid
Para ello reivindicó “el arte del diálogo” en las aulas que propugna el papa Francisco frente los monólogos educativos. De hecho, invitó a los directores de los centros a salir a las puertas de los colegios para poder salir al encuentro de las familias más vulnerables y así responder a sus necesidades como comunidad.
Otra de las preocupaciones que mostró Cobo en su alocución fue la realidad del profesorado de religión, su contratación y sus lagunas formativas. A la vez, reivindicó un acompañamiento pastoral en los colegios, sea a través de sacerdotes o de comunidades de laicos. Por su parte, el presidente de Escuelas Católicas de Madrid, Miguel Ángel Fraile, explicó al cardenal que los 340 centros representados en esta asamblea siguen adelante con su misión con “no pocas dificultades”.
