Al menos 51 víctimas de abusos sexuales en el seno de la Iglesia católica en Portugal han pedido una indemnización económica a esta institución. Así lo ha informado, tal como recoge EFE, el grupo Vita, creado por la Conferencia Episcopal Portuguesa (CEP).
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En un comunicado publicado en las últimas horas, el grupo indicó que ha sido contactado por 112 víctimas de violencia sexual, de las que 26 están siendo acompañadas psicológicamente y 51 han solicitado una compensación financiera. Sobre cómo se están llevando a cabo esas indemnizaciones, el grupo no ofreció más detalles y apuntó que ha sugerido a la Iglesia revisar algunos “aspectos de la regulación” que define el proceso de la compensación financiera de las víctimas.
Asimismo, agregó que está llevando a cabo visitas por las diócesis para desarrollar tareas de sensibilización y capacitación “de las diversas estructuras eclesiásticas”. Hasta ahora ha estado en las diócesis de Évora, Vila Real, Portalegre-Castelo Branco y Funchal, y tiene previsto acudir a la de Viseu.
Hasta finales de 2024 para pedir la indemnización
En abril pasado, la CEP aprobó indemnizar a las víctimas de abusos que soliciten una compensación, a través de un fondo monetario que financiado por “contribuciones solidarias” de todas las diócesis en el país, pero no precisó los montos. Lo que sí está estipulado por la CEP es que los interesados tienen hasta el cierre de 2024 para solicitar una compensación.
El grupo Vita fue creado en mayo de 2023 por el episcopado portugués para prestar apoyo a las víctimas de abusos sexuales que eran menores de edad o adultos vulnerables en el momento de la agresión. Un informe realizado por expertos a petición de la CEP reveló en febrero de 2023 que en el país hay al menos 4.800 víctimas de pederastia desde 1950.