El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 6 de Sagunto (Valencia) ha acordado la prisión provisional, comunicada y sin fianza para el hombre de 46 años detenido por el ataque mortal a los frailes del monasterio franciscano de Gilet el pasado sábado 9 de noviembre.
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Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, el agresor queda investigado en una causa abierta por dos delitos de homicidio/asesinato, uno de ellos consumado y el otro en grado de tentativa, tres delitos de lesiones y un delito de allanamiento.
El detenido sufre brotes psicóticos desde hace seis meses y tenía numerosos antecedentes policiales, además de diversas adicciones, según publican hoy los medios locales.
Ayer mismo se confirmó la muerte de uno de los frailes, de 76 años. El religioso había sido dado por muerto el mismo día del ataque, aunque luego se confirmó que seguía con vida pese al pronóstico reservado.
“Voy a mayar a los frailes”
Los otros tres heridos –de 57, 66 y 95 años– presentaban heridas y solo el de 57 años ha sido dado de alta. Los otros dos continúan ingresados en el Hospital de Sagunto.
El provincial de la provincia franciscana de la Inmaculada, fray Joaquín Zurera Ribó, OFM, fue quien informó el sábado de que “una persona perturbada” entró en el convento y fue “agrediendo a los hermanos que estaban en su habitación, con la intención —según le escucharon— de matar a los frailes”.