El próximo 25 de diciembre la comunidad Sant’Egidio México compartirá la mesa de Navidad con más de 2,000 pobres. Las comidas se ofrecerán en diferentes sedes de tres entidades: Ciudad de México, Puebla y Guadalajara, con el apoyo de 500 voluntarios.
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En entrevista para Vida Nueva, César Cárdenas, de la Comunidad de Sant’Egidio México, dejó en claro que no es filantropía ni altruismo, sino una iniciativa surgida del corazón de cristianos comprometidos con el Evangelio, que quieren verdaderamente ayudar a construir un mundo diferente.
Un plato más en la mesa
“Para esta temporada, como siempre en Navidad, decimos que no queremos dejar a nadie fuera, queremos añadir un plato a la mesa para todas aquellas personas que, por alguna razón, no pueden celebrar Navidad, ya sea por la soledad, ya sea por la carencia económica, ya sea por las múltiples dificultades”, explicó Cárdenas.
Y añadió: “Ese día, los miembros de Sant’Egidio no queremos que nadie esté fuera de la fiesta. Obviamente esto implica un despliegue de nuestros voluntarios y amigos, que donan tantas cosas que se necesitan”.
La Navidad de Sant’Egidio
Cada año, la comunidad Sant’Egidio organiza comidas navideñas en más de 700 ciudades del mundo: “el año pasado éramos alrededor de medio millón de personas en todo el mundo. No es un esfuerzo aislado, no es un esfuerzo de un momento, sino a partir de un movimiento que los últimos 58 años ha estado presente, en todo momento, a lado de los pobres, y también ahí donde hay dificultades para celebrar la Navidad”.
Para César Cárdenas, las dificultades que narra el Evangelio en torno al nacimiento de Jesús, son una señal importante para la humanidad, “para decir que la salvación que esperamos no viene por la fuerza del dinero, del poder, de la violencia, de las armas, de la política, sino que es más sencillo, pero también más complejo, porque necesitamos cambiar algo en el corazón de la humanidad, que es partir de los últimos, de los pobres, de los más frágiles para, a partir de ahí, construir una humanidad nueva”.
“Una Iglesia pobre para los pobres”
En ese sentido, compartió su perspectiva respecto a las comidas de Navidad de Sant’Egidio: “¡Qué bella imagen es estar todos en la mesa del señor, el día de Navidad, gente de diferentes razas, culturas, etnias, clases sociales, todas conviviendo en un mismo momento de armonía y de felicidad donde se eliminan todas estas barreras!”.
Destacó que también hay otros momentos alrededor del 25 de diciembre donde se acompaña especialmente en los asilos o a los enfermos: “la motivación siempre va a ser la lectura del Evangelio donde nos dice, Jesús fue a los suyos, y los suyos no le reconocieron, quedando fuera de su propia fiesta. Esta es una imagen que no queremos que se repita y que nos empuja a estar al lado de los pobres. Como ha dicho papá Francisco, siempre queremos construir una Iglesia pobre para los pobres”.
Lejos de la cultura del descarte
Para conocer cómo donar a la cuenta de Sant’Egidio es necesario visitar su sitio en internet; “nos pueden ayudar también con cosas en especie, con los regalos que se les da a cada una de estas personas… dar algo que sea útil y personalizado a cada amigo de Sant’Egidio: bufandas, gorros, chamarras, pero también pantalones, tenis, zapatos; todo esto lo damos nuevo… cosas nuevas, muy dignas, para ayudar a la gente sobrellevar el frío, o con alguna carencia en particular”.
Cárdenas invitó a las personas interesadas a unirse como voluntarios para asistir a las reuniones previas de preparación, y para ello proporcionó su número telefónico: 55 59657628, “¡Queremos vivir esta Navidad solidaria!”.
Hizo un llamado a los fieles a centrarse “en cosas más profundas importantes de la humanidad, que es construir. En este caso, el reino que empieza desde acá y que nos ayuda a mantener nuestra mirada en lo más profundo, lejos de la cultura del descarte, como siempre lo menciona papa Francisco: no entrar en esta cultura de la dictadura del materialismo, de solamente preocuparnos por el dinero por el beneficio personal o solamente en nuestras vidas”.
“Unidad y reconciliación”
La espiritualidad -dijo César Cárdenas- “nos ayuda a centrarnos en un mensaje mucho más profundo, un mensaje de cambio de vida, de corazón, que ayude a construir verdaderamente un mundo diferente, lejos de la violencia, de las armas, del poder, sino un mundo donde podamos vernos como hermanos, respetarnos, convivir; donde podamos no dejar a nadie fuera, esto un principio de paz y al final este momento forma parte de un movimiento que es la construcción de la paz y donde la paz para que sea verdadera”.
La motivación principal -concluyó- es no vivirlo solamente como un momento de fiesta, “sino como un momento de unidad, de reconciliación, donde nos podamos hermanar verdaderamente, todos los que estamos ahí presentes en unidad con todas las comidas de Navidad en el mundo, y también invitar a la gente a que se unan”.
La Comunidad de Sant’Egidio es un movimiento internacional de laicos que se basa en la oración, los pobres y la paz.