Cuatrocientos millones de niños están bajo el yugo de la esclavitud, a pesar de que hace 90 años que entró en vigor la primera legislación internacional contra esta práctica. Niños esclavos como el pakistaní Iqbal Mashi, asesinado en 1995 a los 12 años por las mafias tapiceras. Católico y militante del Frente de Liberación del Trabajo Forzado de Pakistán, logró el cierre de varias fábricas cuyos trabajadores eran menores. Coincidiendo con el aniversario de su muerte, el Movimiento Cultural Cristiano propone reivindicar el 16 de abril como Día Internacional contra la Esclavitud Infantil. Se realizaron actividades en toda España, como una concentración en la madrileña Puerta del Sol. El obispo de Santander, Vicente Jiménez, expresó su apoyo en una carta pastoral.
En el nº 2.656 de Vida Nueva.
