La Iglesia católica de Madagascar celebró, el domingo 8, una jornada por la reconciliación y la justicia, en mitad de la crisis política más grave de los últimos años y que ha costado la vida a decenas de personas. Existe un enfrentamiento entre el presidente Ravalomanana y el alcalde de la capital (Antananarivo), Rajoelina, que han llevado a la calle en forma de violentas manifestaciones y cargas policiales. Fuentes en el país comentan a Vida Nueva que en la base del conflicto está la pérdida de la paciencia de una población cansada de falsas promesas y decepcionada con el que consiguió derrocar al dictador Ratsiraka, mientras la pobreza y el paro siguen acosando, también, a los malgaches, en uno de esos ‘40 últimos países’ para esta Cuaresma.
En el nº 2.648 de Vida Nueva.