Sacerdote en la Vuelta Ciclista a España
(M. Á. Malavia) ¿Qué hace un sacerdote cada año en la Vuelta Ciclista a España? Conduzco un coche de la organización, llevando a un médico y a un informático.
¿Cómo surgió tu participación, siendo tú sacerdote? En mi primera parroquia, en Mallabia (País Vasco), conocí a gente ligada al ciclismo que me invitaba a carreras locales. Entonces coincidí con corredores como Lejarreta o Gorospe, a los que incluso he casado. En cuanto a la Vuelta, desde hace 10 años cojo mis vacaciones en septiembre para estar aquí, pues es mi afición.
¿Y cómo te ven los corredores? Con muchos me llevo muy bien. Al fin y al cabo saben que desempeño una función de presencia, amable y de acompañamiento, de acuerdo a mi condición sacerdotal. Además, todos los domingos celebro la Misa en el Punto de Encuentro. Y son muchas las personas ligadas de un modo u otro a la Vuelta que vienen al encuentro con el Señor. En el fondo, trato de caminar junto a los demás, llevando a mi lado a Cristo, ofreciéndolo a los demás.