Una campaña de la diócesis de Ourense invita a recuperar el sentido del domingo
(Juan M. Castelblanque) En la época actual, el domingo va perdiendo su sentido cristiano para reducirse a un mero día del fin de semana, momento de ocio y diversión en el que disminuye el número de participantes en la liturgia dominical y desaparece, poco a poco, el sentido de obligatoriedad de asistencia a la Eucaristía.
Con el propósito de revertir esta situación, la diócesis de Ourense pone en marcha una campaña que pretende “recuperar el sentido del domingo como fiesta primordial con el objetivo de conocer, celebrar y vivir la fe, afrontando la crisis de práctica dominical que se vive”, señala Francisco Pernas, sacerdote diocesano y coordinador de la campaña.
Este proyecto tiene su origen en un cursillo sobre el domingo que se realizó en la ciudad de Ourense, en el mes de noviembre, y que después se impartió en el resto de localidades de la Diócesis. En dicho curso surgió la idea de desarrollar alguna acción que sirviera para reivindicar la importancia del domingo. Así es como nace una campaña que enraíza con lo dicho por el papa Juan Pablo II en Dies Domini, donde afirma que el domingo “es el día de la resurrección, el día de los cristianos, nuestro día… constituye el centro mismo de la vida cristiana”.
Una idea sobre la que incide el coordinador de la campaña, para quien “el domingo es un signo de identidad de la comunidad cristiana porque en él celebramos la resurrección de Cristo. En la Eucaristía dominical somos percibidos inequívocamente como cristianos al celebrar lo que nos identifica como tal, el misterio pascual”.
‘Juntos en la misa’
Para la campaña, que comienza el 30 de marzo y finaliza el 20 de abril, se han preparado unas pancartas, que se colocarán tanto en el interior como en el exterior de los templos de la ciudad de Ourense y de las principales parroquias de la Diócesis, con el lema Xuntos na misa, ledos na esperanza (Juntos en la misa, alegres en la esperanza, en castellano). Además, a cada iglesia se han enviado unos guiones para las homilías de los cuatro domingos que va a abarcar la campaña, así como materiales litúrgicos en los que se abordan los diferentes aspectos de este día. También se ha compuesto una canción para ser cantada durante la misa y el próximo 30 de marzo se entregará a todos los que acudan a la celebración de la Eucaristía un tarjetón con un decálogo sobre el día en el que el Señor descansó. Por su parte, el obispo de Ourense, Luis Quinteiro Fiuza, ha escrito una carta a todas las familias de la Diócesis, invitándolas a vivir el domingo desde un sentido cristiano.
“El domingo debe ser vivido en todas sus dimensiones, su centro es la Eucaristía y en él cada uno debe buscar la forma de relacionarse con su parroquia. Es un día en el que hay que disfrutar de la naturaleza, los amigos, la familia. Una jornada que permite al cuerpo regenerarse del ritmo estresante de la semana”, recuerda Francisco Pernas.
Una idea sobre la que inciden los documentos que la diócesis ha preparado para esta campaña, donde se lee que “el domingo es un día de descanso, en el que hay que reponer fuerzas…, pero el descanso de Dios no es un no hacer nada, sino un mirar todo lo creado, gozando de la belleza de lo realizado y estableciendo una relación de amor con las cosas y las personas”.