“La fachada siempre había estado allí y perduraba en su turbulenta memoria como la evocación más preciada de la infancia. Ahora recuerda que, detrás del lago camuflado en el parque, le gustaba …
Presidir unas exequias le exige al sacerdote manejar unos fundamentos teológicos para hablar de la esperanza de la Resurrección, pero también establecer un contacto previo con la familia del difunto para contextualizar su andadura vital y creyente. En vísperas de la conmemoración de Todos los Fieles Difuntos (2 de noviembre), compartimos algunas consideraciones pastorales en torno a la muerte que faciliten el acompañamiento en este viaje y en el posterior proceso de duelo. Se trata de imágenes, metáforas y reflexiones que, a buen seguro, pueden ayudar en la preparación de las homilías para estas celebraciones y –lo que es más importante– nos animan a vivir tan inevitable tránsito como un encuentro, no como una separación.