Podemos comenzar esta reflexión con una sonrisa. Fue el inefable Louis van Gaal, siendo entrenador del Barcelona, quien dejó para la historia aquella célebre frase: “¡Siempre negativo, nunca positivo!”. Por extraño que parezca, próximos ya al Miércoles de Ceniza (2 de marzo), de algo de eso queremos hablar: cómo 'des-negativizar' la Cuaresma y llegar a entenderla y vivirla como un tiempo altamente positivo. ¿Tiene sentido anhelar una Cuaresma y una Pascua con un cierto componente de novedad? ¿No está el lenguaje de la pandemia indicándonos una senda a seguir?