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José Antonio González (Cinco panes)

José Antonio González (Cinco Panes)

agujero

Érase una vez en el Imperio Romano

“Estamos en el año 50 antes de Jesucristo. Toda la Galia está ocupada por los romanos… ¿Toda? ¡No! Una aldea poblada por irreductibles galos resiste, todavía y como siempre, al invasor”. Con estas

Piedad

Dar la vida

“Qué necesario me parece, siendo Martes Santo, evaluar las implicaciones de estar dispuestas a dar la vida por las demás personas, ampliando horizontes más allá de nuestra limitada experiencia personal sin hacer de ello una consigna repetible ni dulcificada”
zapatero zapatos

Evangelización ilegal

“Papi, ¿qué hay ahí?”, me preguntó el otro día mi hijo señalando hacia una puerta por la que habitualmente pasamos de camino al cole. “Creo que es un taller ilegal de aparado”, le respondí yo.

partitura música

Siente, vive

Hace una infinidad de años tuve una maestra de violoncello que me decía que para tocar con pasión la música se tenía que meter dentro del cuerpo. Me llevó un tiempo comprender esta afirmación que viene

manos

Dale duro a la hucha

Hace unos días, abrimos la hucha de mi hijo para ver cuánto dinero había ahorrado en su interior, con el fin de adquirir un juguete que le hacía ilusión tener. Yo propuse romperla con un martillo; pero

dinosaurio

Los profetas, dinosaurios del pasado

No estoy seguro de haber comentado anteriormente la fascinación de mi hijo por las formas de vida prehistóricas; creo que no. Sea como fuere, tengo la sensación de haber aprendido más nombres de criaturas

amasar pan masa manos

Quiero pasar hambre

Hace un par de semanas, mi hijo me dijo: “Cuando sea mayor voy a tener mil hijos”. “¡Madre mía!”, dije yo, “¿y cómo piensas darles de comer? Porque mil personas comen un montón”.
“Ah, papi,

hombre fuego

Caliéntame

“Papi”, me decía mi hijo la otra mañana de camino al cole, “cuando me convierta en dragón voy a echar mi aliento de fuego para que no haga tanto frío en la calle”.
“Pero hijo”, decía yo como

Amado hijo:

Tengo la certeza de que no leerás esta carta porque estás dando ahora tus primeros pasos en la pronunciación de aquello que está escrito; cualquier momento te parece bueno para aventurarte a decir las

Diferencias

 ¿Alguna vez te has detenido a ponderar la cantidad de diferencia que eres capaz de tolerar en las demás personas? La boca y el corazón rápidamente se llenan de elogios hacia el ser humano que piensa de