Las ciudades se llenan de luz. Guirnaldas, filigranas, millones de bombillas led que encienden las calles, incluso antes del Adviento. “Iluminación extraordinaria de Navidad” que, cada año un poco más, prescinde de la propia iconografía de la Natividad y de la Epifanía. Pero los católicos debemos aprovechar este despliegue para hacer catequesis. Dios vive en la luz, Jesús es la luz, la Iglesia irradia esa luz que ahora brilla sobre nosotros