Lo ha aprobado en el Parlamento el partido conservador Nueva Democracia, aunque la formación se ha dividido y ha debido apoyarle la izquierda
El primer ministro heleno, Kyriakos Mitsotakis, había reclamado a la Iglesia que no se opusiera: “Al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios”
Jerónimo II, arzobispo ortodoxo de Atenas y patriarca de Grecia, exigió que la votación fuera “nominal”