La Capilla del Pocito, ubicada en el complejo de la Villa de Guadalupe, en la Ciudad de México, es uno de los monumentos religiosos más importantes del país; este recinto tuvo su origen en el Acontecimiento Guadalupano, pues, según la tradición, en el sitio de su ubicación había un borbollón en el que los peregrinos pasaban a beber agua y a bañarse. La vena de agua estaba muy cerca del lugar en que la Virgen de Guadalupe habría pedido al santo indígena que le construyera su casita.