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Raúl Molina

Raúl Molina

Planchar ropa

La mística de la plancha

Nunca me atreví a escribir sobre este tema dada la cantidad de detractores virulentos que me he encontrado cuando he querido compartir que a mí me gusta planchar. “Plancha sí o plancha no” se convierte

360 euros

Por si alguien no está al corriente, 360 euros es el coste de una cita para tramitar asilo o refugio en España para aquellas personas procedentes de países que están amparados por esta

Esos no son nuestros dioses

El mundo no cambia. En ese “eterno retorno” que Nietzsche nos anunciara, cada instante cobra un protagonismo propio y, tristemente, no solo se replica la alegría y la esperanza, también llegan una y otra

Un laico en la corte del rey Arturo (II)

Ya comenté la semana pasada que participé en el Encuentro de Laicos sobre Primer Anuncio. Sigo compartiendo mis impresiones de esos dos días en Camelot, como lo hiciera el yanqui de Mark Twain.

Un laico en la corte del rey Arturo (I)

El fin de semana del pasado 17 de febrero participé en el Encuentro de Laicos sobre Primer Anuncio que se celebró en la Fundación Pablo VI de Madrid. Asistí en calidad de representante de CEMI, asociación

De púlpitos y fariseos

Los que de vez en cuando disponemos de púlpitos frecuentemente nos acostumbramos a vivir como sepulcros blanqueados, y, en muchas ocasiones, consciente o inconscientemente, nuestro único fin acaba siendo no bajarnos de él.

¡Cuánto no brillan!

¿Qué esperanza nos trae la clemencia de Alá, la misericordia y la justicia de Yahvé y el amor del Dios de Jesús? Contemplando el dolor que su prostituido nombre genera en Palestina, parece que

tomas halik

El sentido del sufrimiento o el sufrimiento como sentido

No voy a entrar en el valor que la posmodernidad da al placer, que ya estoy entrando, pero es esa una lectura de la realidad que se nos ha contagiado en una ‘versión religiosa del optimismo’ que,

Ni una de mis vacas

Hace unos días me enteré de que existe el Centro de Humanización de la Salud de Madrid. Los seres humanos, que yo pensé que “humanos” éramos por derecho propio, hemos tenido que crear centros de

Y tú, Jerusalén

Al acercarse Jesús a Jerusalén y ver la ciudad, lloró sobre ella, mientras decía: “¡Si reconocieras tú también en este día lo que conduce a la paz! Pero ahora está escondido a tus ojos”