Preocupadas por la nueva legislación del Gobierno, mujeres de barrios carenciados le escribieron al Pontífice para requerir su participación y el Papa les contestó y fijó su posición
Referenciaron al próximo beato fray Mamerto Esquiú quien –en su sermón de la Constitución– pidió a los funcionarios: “Obedezcan, señores. Sin sumisión no hay ley, sin ley no hay patria, no hay verdadera libertad”