Mañana se cumplen 10 años de que el cardenal argentino, Jorge Bergoglio, fuera elegido como el 266º Papa de la Iglesia Católica. Van las que, en mi opinión, son las características más elocuentes de su gestión, también 10.
1) Las formas. Desde que pagó su cuenta en la Casa del Clero, en Via della Scrofa, por su hospedaje durante el cónclave que lo eligió, mostró que no quería privilegios por su posición, y dio claras señales de una humildad que lo ha acompañado en esta década.
2) La misericordia. Apenas iniciando su pontificado, del 8 de diciembre del 2015, al 20 de noviembre del 2016, proclamó el Jubileo de la Misericordia, llamado coloquialmente el Año de la Misericordia. Esta palabra ha marcado el recorrido papal en estos dos lustros.
3) Marxista-Hereje. Las críticas que ha hecho al neoliberalismo, sobre todo en la encíclica ‘Fratelli Tutti’ (números 163-169), le granjearon el mote de comunista. No condenar a los homosexuales y divorciados vueltos a casar, y limitar las misas tradicionales le han ganado el que sea considerado hereje.
4) Alegría. Pese a tener fama de ser muy adusto en Buenos Aires, desde que llegó al Vaticano se ha caracterizado por sonreír e invitarnos a la alegría. No en balde dos de sus principales documentos, la ‘Evangelii Gaudium’ y la ‘Amoris Laetitia’ la invocan en sus mismos títulos.
5) Naturaleza. La invitación a cuidar la naturaleza, otra de sus preocupaciones constantes, quedó plasmada en la ‘Laudato Si’. En el texto dejó constancia de su cercanía con Francisco de Asís, de quien tomó el nombre para ser llamado de esa manera ya como Papa.
6) Periferias. Cuando pidió una Iglesia en salida, se pensó que ésta era sólo física, y que implicaba acudir a las periferias territoriales. Sin embargo, dejó claro que también hay que dirigirse con el mismo empeño a las existenciales -alejados, minorías, migrantes, vulnerables, etc.-.
7) Pobres. Ha insistido en que le gustaría una Iglesia pobre para los pobres, recuperando así la opción por ellos, de gran arraigo en América Latina, y que él mismo impulsó en la redacción del documento final de la Conferencia Episcopal Latinoamericana de Aparecida, Brasil.
8) Pastores con olor a oveja. En su primer Semana Santa como Papa, al presidir la Misa Crismal, nos recordó a los curas que la unción recibida en la ordenación no significa adquirir un perfume que nos separa de los fieles, sino que nos acerca a ellos: hay que oler a oveja, remató
9) Inclusión. Y su deseo de atraer a los alejados, de incluir a quienes se sienten fuera de la Iglesia, ha permeado también todo su ministerio. Más aún, llegó a afirmar que la inclusión, sobre todo de personas con discapacidades, determina el grado de civilización de una nación.
10) Sinodalidad. Quizá sea la palabra que mejor distingue a estos 10 años. Y no sólo por el sínodo que lleva su nombre, sino por la permanente indicación papal a escuchar, a tomar decisiones colegiadas, a no imponer las propias ideas en base a autoritarismos.
Pro-vocación
El pasado 8 de marzo, durante la marcha por el Día Internacional de la Mujer, algunas jovencitas pintarrajearon las paredes de la Catedral de Monterrey, México. Muchas personas se indignaron por tal manifestación de violencia. Sostienen que, con esas actitudes, los movimientos feministas se alejan de la ciudadanía, en vez de granjearse simpatías. De acuerdo. Sin embargo, a la mañana siguiente se borraron las consignas, se limpiaron los espacios y se volvieron a pintar. ¿Algún día se repararán los agravios que las mujeres sufren cotidianamente? Ojalá y fuera como repintar una barda.