JOSÉ BELTRÁN | Director editorial de Vida Nueva
MIÉRCOLES 10. Inédito. Los obispos de Getafe nos convocan a los periodistas de la diócesis. No es una rueda de prensa. A la inversa. Los pastores ceden la palabra. Quieren escuchar. No hay postureo. Y aquello torna en un inesperado grupo de vida. Comunicación bidireccional.
VIERNES 11. Los pies se resisten a la medida del zapato. No evoco a Cenicienta sino a una manada de chavales que se apean de un castillo hinchable solidario. El desafío: calzar y atar cordones cada diez minutos. ¿Mi regalo? Poder tocar tierra con ellos. Abajarse, literalmente.
LUNES 15.Algunos documentos vaticanos suelen entregarse a los periodistas y a las editoriales horas o días antes de que se hagan oficiales para que puedan trabajarse. Bajo embargo. Pongamos una encíclica. Pues bien, un periodista italiano rompe el acuerdo y lo cuelga en su web antes de tiempo. No para apuntarse una exclusiva, sino para apuntar con un dardo al Papa. Le tienen ganas a Francisco. Desde dentro.
MIÉRCOLES 17. Que me acusen de “osoritis”, pero nunca había visto a un arzobispo salir a escena. Lo habitual es hacer mutis por el foro al bajar del ambón. Pero Osoro se deja ver en la platea del Teatro Español, para explicarle al respetable para qué sirve un arzobispo. Claro que él tiene tablas. Las que da volcarse en Orense, sufrir en Oviedo y patearse las calles de Valencia. Iglesia en salida es un prelado con un papel fuera del púlpito.
JUEVES 18. La encíclica, ahora sí, para todos. Me la bebo en un sorbo. Cita a Dante, Ricoeur, Guardini. Pero sobre todo, cita a los pobres. Ecología íntegra.
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En el nº 2.945 de Vida Nueva.
