Controvertida muestra artística en Mendoza

  • La obra de una artista mendocina fue cuestionada por la Iglesia
  • Ante los destrozos de algunos fieles, la arquidiócesis repudió los actos de violencia

Controvertida muestra artística en Mendoza

En la Universidad Nacional de Cuyo, en el Rectorado, se está realizando la muestra artística 8M Manifiestos Visuales, en el marco de los homenajes por el día de la Mujer para visibilizar reivindicaciones y conquista de derechos. 



La Pastoral Social de la arquidiócesis de Mendoza publicó un comunicado en el que expresa que el contenido de esta obra de la artista Cristina Pérez “hiere gravemente nuestras convicciones religiosas“, y expresaron dolor y cercanía ante quienes se sintieron “agredidos y violentados por esta falta de respeto a su fe”.

Manifestaron que la muestra ha provocado tristeza e indignación porque “contiene elementos que, desde lo caricaturesco, ejercen una violencia simbólica sobre signos religiosos cristianos, no solamente católicos”. Opinaron que esta expresión traiciona el camino del respeto y la plena vigencia de los derechos humanos, incluidos los religiosos.

Agregaron que la Universidad debe contar con un espacio abierto y plural donde se ejercite el diálogo y la consecuente cultura del encuentro. Y aseveraron: “Valoramos el arte como legítimo canal de comunicación de ideas, talentos y sentimientos del artista. Su libertad de expresión nunca se verá afectada si respeta integralmente las convicciones del otro, incluidos sus sentimientos y creencias religiosas”.

Violencia

Después de este cuestionamiento de la pastoral social mendocina, un grupo de personas se convocaron, y después de rezar frente a las imágenes comenzaron a romper y destruir la obra. Por tal motivo, la Iglesia de Mendoza junto a la pastoral social, repudió estas actos de violencia física y se solidarizó con las artistas que se vieron afectadas en su trabajo y esfuerzo.

Invitaron nuevamente a la concordia y la paz “que se pierde en los extremos”, cuando se deja de percibir que detrás de las obras o símbolos hay personas que tienen creencias o ideologías que no deben ser “violentadas, ridiculizadas o agraviadas”.

Finalmente, lamentaron “el accionar de personas que viven su religiosidad como en tiempos oscuros, que tan dolorosos han sido para la humanidad”.

Foto: Hora Cero
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