La Secretaría de Protección de Niños y Jóvenes de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), publicó su Informe Anual 2023, titulado ‘Hallazgos y recomendaciones sobre la implementación de la Carta para la Protección de Niños y Jóvenes’, en el que establece que, del 1 de julio de 2022 al 30 de junio de 2023, se recibieron 1.308 acusaciones, correspondientes a 1.254 víctimas sobrevivientes; esto significa una disminución de 1.396 denuncias, en comparación con el año de auditoría anterior.
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El informe de los obispos de los Estados Unidos se basa en la auditoría realizada por la consultora especializada StoneBridge Business Partners, así como en una encuesta realizada por el Centro de Investigación Aplicada en el Apostolado (CARA) sobre denuncias de abuso de menores y costos.
Se trata del 21º informe que, sobre el tema, presenta la Iglesia norteamericana, desde 2002, cuando los obispos establecieron la Carta para la Protección de Niños y Jóvenes, como un marco de procedimientos para abordar las acusaciones de abuso sexual de menores por parte del clero y establecer protocolos para proteger a niños y jóvenes.
El informe asegura que la disminución en el número de denuncias se debe en parte a los programas de compensación y quiebras, pero también al trabajo continuo de la Iglesia para garantizar la seguridad de los niños y adultos vulnerables.
Por ejemplo, en 2023, la Iglesia realizó 2.145.719 verificaciones de antecedentes del clero, empleados y voluntarios. Además, más de 2.1 millones de adultos y más de 2.8 millones de niños y jóvenes recibieron capacitación sobre cómo identificar las señales de advertencia de abuso y cómo denunciarlas.
Casos relacionados con niños y jóvenes
En el nuevo informe, las acusaciones que involucran a menores representan 17 casos actuales, mientras que todas las demás acusaciones fueron hechas por adultos que alegaban hechos ocurridos cuando eran menores de edad.
Cabe mencionar que el método más frecuente para informar una acusación fue a través de un abogado, que representó 877 (67%) acusaciones, seguido de informes autodivulgados con 313 (23%). Otros métodos de presentación de informes, por un total de 118 informes, fueron realizados por el cónyuge, un familiar u otro representante.
Los hallazgos también indican que, durante este período, siete clérigos acusados fueron destituidos permanentemente del ministerio o jubilados (5%); y de los presuntos infractores, el 91% ya han fallecido, han sido removidos permanentemente del ministerio o son laicos. No se informa que ningún clérigo acusado de manera creíble esté en el ministerio activo.
Colaboración de las diócesis
Durante el período de auditoría, las diócesis y eparquías brindaron asistencia y apoyo a 183 víctimas sobrevivientes y sus familias, y se ofreció ayuda continua a 1.662 víctimas sobrevivientes que habían informado en períodos de auditoría anteriores.
Además, el 100% de las diócesis y eparquías participaron en el proceso de auditoría. StoneBridge visitó físicamente 48 diócesis/eparquías y utilizó la tecnologías para realizar 17 visitas remotas adicionales a diócesis/eparquías, para un total de 65 visitas de auditoría ‘in situ’ y datos recopilados (‘proceso de recopilación de datos’) de otros 131.
De las 65 diócesis/eparquías que participaron en las auditorías ‘in situ’, hubo sólo cuatro hallazgos de incumplimiento de ciertos aspectos de la Carta.
CARA completó la recopilación de datos para la encuesta anual del año fiscal 2023 en enero de 2024. Todas, menos dos, de las 196 diócesis y eparquías completaron la encuesta, para una tasa de respuesta del 99 por ciento.
Un trabajo integral
Tras informar que los costos relacionados con las acusaciones aumentaron en un 99%, siendo dos diócesis las que representan el 56% de los gastos relacionados con las acusaciones, el Comité para la Protección de Niños y Jóvenes de la USCCB y la Junta Nacional de Revisión enfatizó que la auditoría y la aplicación continua de políticas de tolerancia cero son dos herramientas importantes en el programa más amplio de la Iglesia para crear una cultura de protección y sanación que supere el requisito de la Carta .
El informe se puede encontrar en este enlace.
