Libros

‘Thomas Merton. El verdadero viaje’


Un libro de Fernando Beltrán Llavador (Sal Terrae) La recensión es de Sonia Petisco, PhD

Thomas Merton El verdadero viaje, un libro de Fernando Beltrán, Sal Terrae

Título: Thomas Merton. El verdadero viaje

Autor: Fernando Beltrán Llavador

Editorial: Sal Terrae

Ciudad: Santander, 2015

Páginas: 160

SONIA PETISCO, PhD | Pocas veces al abrir un libro he experimentado de inmediato como en este la certeza de hallarme ante una prosa elegante, tersa, enormemente clara, que impone su propio ritmo de lectura y que cautiva con el fluido de una perenne sabiduría. Se trata de la edición publicada por Sal Terrae con motivo del magno centenario del nacimiento de Thomas Merton, contemplativo de proyección universal que nació en 1915 en Europa, vivió como monje en Estados Unidos y murió en Asia en 1968. En resumen, nos hallamos ante una síntesis formidable de su vida y de su obra, una selección de sus textos capitales que se nos ofrece para nuestro disfrute como un viaje de ida y vuelta circular rebosante de vida.

En realidad, me propongo empezar por el final e invitar al lector perspicaz a que, antes de nada, se afane en descubrir en este trabajo lo que más nos concierne, lo más revelador: la primacía del amor que Thomas Merton suscita en toda su escritura creadora, hondamente cimentada en su herencia cisterciense desde su doble vocación de monje y escritor.

Pero, además, importa destacar los principales argumentos del discurso de Merton erigidos en torno a dos imágenes fundamentales, la del “viaje” y la del “yo”: un viaje hacia la trascendencia en aras del yo silencioso que mora en nuestro interior. No hay palabras para expresar la dulzura de presentir que existe todo un mundo del que el falso yo se halla totalmente ausente, apto para aquel que sabe quedarse solo y decir “no”.

Sin duda, nos encontramos ante una encrucijada de caminos que surgen a través de doce capítulos con mucho peso, que Fernando Beltrán Llavador –profesor de la Universidad de Salamanca y asesor de la International Thomas Merton Society– va desgranando devotamente en unidades temáticas impregnadas de una rica simbología característica del pensamiento mertoniano. De uno a otro, se van matizando en cada uno de ellos sugerentes lecturas condensadas en publicaciones que gozaron de un gran prestigio en su día y que comprenden desde su autobiografía La montaña de los siete círculos (1948), fascinante relato sobre su conversión al catolicismo, hasta su Diario de Asia (1973), crónica sobresaliente de su último viaje a Oriente, incluyendo títulos tan destacables como El Signo de Jonás (1953), Pensamientos en soledad (1958), El hombre nuevo (1961) o El Zen y los pájaros del deseo (1968).

No obstante, la palabra de Merton no se agota en las advertencias y exhortaciones que componen muchos de sus libros y que merecen recogerse al vuelo, ni en el ambicioso compendio de sus descubrimientos, ni siquiera en la hondura y lucidez de sus reflexiones espirituales, mucho menos en sus continuas evocaciones sobre la presencia de Dios en el alma del hombre en permanente definición. Un cristianismo cordial, libre y subversivo, siempre auroral, le permitirá rebelarse contra los cataclismos sociales más relevantes del momento y rechazar los manejos del poder, origen de todas nuestras preocupaciones actuales ante tantas clases de destrucción.

Versos que acompañan

Hay algo más, tantos y tantos compañeros de viaje de Merton son sus versos, en donde se constata su copiosa y firme voluntad de expresión y comunicación universal en búsqueda del absoluto. Tomemos como ejemplo su obra Cables to the Ace, arriesgado experimento poético que constituye un agravio al mito occidental, o The Geography of Lograire, territorio libre para la imaginación pleno de símbolos, alegorías, diálogos, leyendas, inspirados en los cultos del Sur del Pacífico o en la conquista del Nuevo Mundo y por donde convendría perderse un poco.

De todo cuanto antecede se da cuenta magistralmente en el nuevo Diccionario de Thomas Merton (Mensajero), de William H. Shannon, Christine M. Bochen y Patrick F. O’Connell, que también figura entre las novedades editoriales de este año y que Dolores Aleixandre comentó en estas mismas páginas.

Desde el agua hasta el fuego, todo tiene su lugar, todo está medido, todo está marcado para saborearlo con la mayor de las cercanías, con la mayor de las bendiciones y que no cesaremos de recomendar.

Completan el presente libro de Beltrán una serie de extractos para meditar con Thomas Merton que adquieren la cadencia de una liturgia que nos ha emocionado y que el tiempo no ha querido olvidar. Recordando una de sus citas bíblicas, desearíamos concluir este viaje apasionante con el que nunca sabremos si nos hemos reconciliado pero sí que nos tiene enamorados: “Quien no ama permanece en la muerte” (1 Jn 3, 14).

En el nº 2.968 de Vida Nueva

Actualizado
11/12/2015 | 00:27
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