Una mirada desde la pastoral migratoria
(Jesús Sastre García– Sacerdote y profesor en el Instituto Superior de Pastoral y en el Instituto de Catequética San Pío X) La anunciada mejoría de los índices económicos parece todavía lejana, y todo apunta a que este 2010 recién estrenado seguiremos padeciendo los devastadores efectos de la crisis. Aunque, como siempre, quienes más la sentirán serán los pobres, los parados y, sobre todo, un colectivo que reúne ambas situaciones: los inmigrantes. ¿Qué podemos y debemos hacer los cristianos ante la crisis?, ¿cómo ayudar más y mejor a esos seres tan vulnerables? El domingo 17, la Iglesia celebra la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, inmejorable ocasión para que, a la luz de la fe y guiados por estas páginas, reflexionemos sobre una realidad que nos llama a educar los hábitos y convertir los corazones para liberar de sus opresiones a los que más sufren.
Pliego íntegro, en el nº 2.690 de Vida Nueva (del 9 al 15 de enero de 2010).