Para comprender la aportación del papa Francisco a la Pastoral Obrera, hay que remontarse a su biografía y trayectoria personal, religiosa y pastoral en tiempos verdaderamente complicados, como han sido siempre para el mundo del trabajo, pero muy especialmente en esta coyuntura marcada por la globalización, bien aprovechada por los “especuladores”, como él llama a algunos grandes empresarios al servicio de las grandes empresas, frecuentemente multinacionales.
La dignidad de la mujer, la pobreza, comunidades indígenas, jóvenes, ancianos y un sinfín de “excluidos” tienen su sitio en el Documento de Aparecida (2007): “La Evangelii nuntiandi de América Latina”, como define la biografía del papa Francisco de la web vaticana. Y en todas esas situaciones humanas descritas no falta su contextualización en las condiciones en las que se crean y mantienen los distintos puestos de trabajo.
Estas son algunas de las expresiones que se utilizan en el Documento de Aparecida (Brasil, mayo de 2007): “Desigualdades en la esfera del trabajo” (DA 48), “no tienen oportunidades de progresar en sus estudios ni de entrar en el mercado del trabajo” (DA 65), “la población económicamente activa de la región está afectada por el subempleo (42%) y el desempleo (9%), y casi la mitad está empleada en trabajo informal. El trabajo formal, por su parte, se ve sometido a la precariedad de las condiciones de empleo y a la presión constante de subcontratación, lo que trae consigo salarios más bajos y desprotección en el campo de seguridad social, no permitiendo a muchos el desarrollo de una vida digna” (DA 71).
Un detalle importante deseo anotar, y son las palabras con las que Benedicto XVI aprobó la publicación del documento: “En este Documento hay numerosas y oportunas indicaciones pastorales, motivadas con ricas reflexiones a la luz de la fe y del contexto social actual”.
Y es que la aportación del papa Francisco a la Pastoral Obrera es su fina percepción de “lo que está pasando”, que es la frase con la que enmarca el conjunto de situaciones en las que se ve inmerso el mundo del trabajo en el “contexto social actual”, como señaló el papa Benedicto.
En esta pequeña introducción no debo dejar de anotar el peculiar método de este Papa jesuita, en cuyo pensamiento siempre encontramos el ver de Dios sobre la humanidad, el juzgar incorporado al análisis de “lo que está pasando” y el actuar del compromiso personal y/o eclesial.
Índice del Pliego
- 1. Proyecto de Dios sobre la humanidad
- 2. Análisis de la realidad, de “lo que está pasando”
- 3. ¿Qué podemos y/o debemos hacer?
