PEDRO LANGA AGUILAR, OSA. Teólogo y ecumenista | El decreto Unitatis redintegratio fue promulgado por su santidad Pablo VI el 21 de noviembre de 1964, después de su aprobación por 2.137 votos a favor y 11 en contra. Veamos seguidamente qué significó aquella puesta de largo en el Aula, qué supuso más tarde su funcionamiento y qué panorama tenemos hoy a la vista. Sobre ciertas carencias, van a primar los éxitos. Sus recurrentes decenios no han hecho sino incrementar la bibliografía y darnos ocasión así para un análisis cada vez más riguroso y, en consecuencia, para un mejor conocimiento.
‘Unitatis Redintegratio’, un regalo para la Iglesia [extracto]
Pliego publicado en el nº 2.917 de Vida Nueva. Del 15 al 21 de noviembre de 2014