Una obra de Lydia Feito Grande (San Pablo, 2009). La recensión es de José Ramón Amor Pan.
Ética y enfermería
Autora: Lydia Feito Grande
Editorial: San Pablo
Ciudad: Madrid
Páginas: 288
(José Ramón Amor Pan) La enfermería está en un proceso de transformación en el que se está planteando su propia definición como profesión, su identidad. Hay una clara recuperación del ideal de cuidado, que está en la base de la tarea enfermera, pero se discute qué obligaciones se derivan del mismo. Por eso, pensar la enfermería es una tarea necesaria y apasionante del momento actual.
Y el libro que tenemos entre las manos es un valioso instrumento para ayudarnos en la consecución de ese objetivo. Como señala su autora, una de las personas que se dedican a la Bioética en nuestro país más seria y competente y que, en la actualidad, trabaja en la Facultad de Medicina de la Complutense bajo la dirección de Diego Gracia, “labores como la enfermería, la medicina o la enseñanza no pueden estar basadas en meros criterios de eficacia, sino que han de remitir a valores de comunicación entre los seres humanos. Por ello, sin rodear de componentes heroicos la tarea del profesional de enfermería, sí es pertinente, sin embargo, insistir en que no puede ser una tarea como cualquier otra”. No puedo estar más de acuerdo.
Evidentemente, no se le puede pedir a este colectivo (como a los médicos u otros profesionales sociosanitarios) que sean unos héroes, pero tampoco se puede permitir que realicen su labor como un mero oficio por el que reciben un sueldo, ni la sociedad puede tratarles como tales. El objetivo a conseguir sería, pues, que hicieran “de la propia vida un compromiso con la excelencia, entendida como virtud, como el ejercicio de una tarea que promueve la búsqueda de lo mejor y que está en permanente cambio y revisión”. Ahí es nada. Pero esa tarea no pueden llevarla a cabo solos, precisan el trabajo coordinado en equipo, y también el apoyo, el reconocimiento y el estímulo de la sociedad entera. Todos nos jugamos mucho en este asunto, por lo que a todos nos debería importar cómo se forman, cómo vivencian su ejercicio profesional y cómo podemos motivar a estos profesionales, auténtico eje de la atención sociosanitaria.
No es la primera vez que Feito nos ofrece sus reflexiones sobre este apasionante campo. De hecho, este libro es una nueva versión de otro publicado el año 2000 en la editorial PPC con el título Ética profesional de la enfermería y que, a mi juicio, no recibió la acogida que se merecía. Confío en que, en la nueva versión, bellamente ilustrada con dibujos realizados por el padre de la autora, y al formar parte de una nueva colección auspiciada por la Cátedra de Bioética de Comillas, la difusión sea mayor.
En el nº 2.695 de Vida Nueva.