Este libro de Ramon Prat i Pons (Editorial Milenio, 2009) es recensionado por José Mª Avendaño Perea.
La caña de pescar. Un camino para explorar el misterio de la vida
Autor: Ramon Prat i Pons
Editorial: Milenio
Ciudad: Lleida
Páginas: 256
(José María Avendaño Perea) Es de agradecer que el vicario general de Lleida, Ramon Prat, nos brinde la lectura, la meditación, la oración y la acción del Evangelio injertado en la vida de cada jornada. Abre su corazón y nos entrega el celo pastoral de muchos años, su preocupación por los hombres y mujeres con los que comparte su existencia como hombre, cristiano y discípulo de Jesucristo, sacerdote que quiere a la Iglesia en medio del mundo. Porque “la gente que sufre y ama, que se pregunta y busca un sentido –nos dice–, plantea a los creyentes la urgencia por encontrar la luz y las motivaciones concretas que nos permitan enfrentarnos a la magnitud de los problemas que afectan a la vida en nuestro tiempo”.
Afirma acertadamente en el prólogo Josep M. Esquirol que “la obra de Prat huye del lenguaje académico y lo plantea todo con un estilo ameno y coloquial… Todo el libro irradia y desprende esperanza”. Y es que La caña de pescar –dedicado al teólogo Josep M. Rovira y a Cáritas, expresión del amor de la Iglesia– es un memorial del pasado, al tiempo que una sedimentación de los retos y signos de esperanza del presente que se ha ido encontrando Ramon a lo largo de su andadura, pero también va dejando todo abierto a los “nuevos impactos de la vida”, pues sabemos que en la vida Dios nos busca a todas horas. Así explica él mismo el porqué del título: “El pescador explora con su caña el misterio de las aguas y, tras mucho esforzarse, pesca algunos peces… Este libro solamente puede ofrecer algunos peces, aunque lo que realmente pretende ofrecer es una caña de pescar que el lector utilice para convertirse con ella en protagonista de la búsqueda”.
Llamada interior
A través de sus cuatro capítulos, el texto nos va adentrando en la exploración del misterio de la vida –como reza el propio subtítulo–, con sus luces y sombras, para finalizar con una llamada a que escuchemos la vida interior, que nos invita a no quedarnos en la visión superficial de las cosas y mucho menos de las personas, a quienes estamos llamados a llevar la Buena Nueva de Jesucristo y su belleza.
El amor; La fe nos posee; La gran mentira de las medias verdades; Dame un vaso de sed, que me estoy muriendo de agua; Cómo Dios se hace presente; Dios jamás deja de querer; Pasión por la justicia; Conocemos el examen final… son sólo algunos de los muy realistas y pastorales comentarios al Evangelio que Prat nos regala.
Un libro ameno, muy ameno, atravesado por el amor a Jesucristo y a la humanidad. Gracias.
En el nº 2.693 de Vida Nueva.
