La Diócesis de San Sebastián se crea a partir de la bula ‘Quo Commo-dius’ (2/XV1949), otorgada por el papa Pío XII y ejecutada por el nuncio Apostólico el 1 de julio de 1950. Mediante esta bula se desmembraron de la Diócesis de Vitoria las parroquias tanto de Bizkaia como las de Gipuzkoa, creándose la Diócesis de Bilbao por una parte y la de San Sebastián por otra: nacía así la Diócesis de San Sebastián, formada por todos los pueblos y valles del territorio de Gipuzkoa.
“La utopía pura y plena es un imposible, pero es como un poderoso viento de cola que moviliza todas nuestras fuerzas y las condensa en un noble objetivo. Esta fuerza se llama esperanza”, ha dicho el obispo emérito de San Sebastián
El Papa envía al prelado donostiarra prolífico en medios de comunicación a la diócesis levantina
Las parroquias de Gipuzkoa que hoy forman la Diócesis de San Sebastián han pertenecido a distintas Diócesis a lo largo de su historia: Vitoria, Pamplona, Calahorra y Baiona.
La Diócesis es sufragánea de la de Pamplona y son sus patronos
San Ignacio de Loyola y Nuestra Señora de Arantzazu.
Hoy por hoy está dividida en seis arciprestazgos y la forman 209 parroquias.
En la actualidad, Fernando Prado es obispo de San Sebastián desde el 31 de octubre de 2022.