Al encabezar la IV Caminata por la Paz, el obispo de Cuernavaca dio algunas pautas para no ser indiferentes ante la situación que se vive en el país, y no permitir que se sigan “normalizando” los procesos de violencia y la exclusión social
“En esta ocasión se han derrumbado muchas casas, muchos edificios, muchas iglesias, pero el terremoto no ha podido derrumbar nuestra fe ni nuestra esperanza”, dijo monseñor Ramón Castro Castro