JUAN RUBIO, director de Vida Nueva | Comenzamos una nueva sección en la revista Vida Nueva. Durará un tiempo prudencial. La oleada de entusiasmo que ha levantado la elección del nuevo sucesor de Pedro, la justifica. Se trata de unas “Cartas al papa Francisco”.
El estilo epistolar es siempre abierto, breve, refrescante, libre y cálido. Hemos pedido a personas significativas en distintos ámbitos de la Iglesia y de la sociedad que le escriban al Papa, con la seguridad de que se las haremos llegar. Les hemos pedido que le abran el corazón, que le cuenten cosas, que le pidan otras, que le sugieran. Es un sencillo peldaño de comunión.
Comunión no es cambiar el discurso cuando esta elección ha descolocado a tantos y han cambiado el paso de forma ridículamente mimética. Comunión es compartir visiones y preocupaciones y ponerlas negro sobre blanco.
En estas cartas deseamos acercar al Papa los gozos y las esperanzas, las alegrías y las tristezas de nuestro mundo y nuestra Iglesia. La gente quiere hablarle al Papa, contarle sus cosas, abrirle su corazón y agradecerle estos gestos tan humanos. Estas cartas pretenden ser un regalo de comunión afectiva, constructiva, llena de amor. Es un gesto que quiere ser respuesta a los suyos.
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- LA CRÓNICA DEL DIRECTOR: Una Pascua que recupera la fuerza del gesto
En el nº 2.842 de Vida Nueva.
El primer artículo lo firma Dolores Aleixandre, y se titula ‘La frescura del Evangelio’
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