Como director del Proyecto de Periodismo Histórico de Puerto Rico me sentí muy contento de que al colega periodista Jesús Dávila el Overseas Press Club le haya otorgado un premio que ese gremio denomina el Lifetime Achievement Award. La ocasión fue motivo para evaluar si hemos hecho suficiente para difundir su trabajo y le pregunté si podría proponer “algunas ideas” para continuar ampliando nuestro proyecto de periodismo histórico, y especialmente, el anterior libro: ‘Enheduanna y Semíramis’.
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Me contestó en una carta que me llamó la atención de manera particular. Aquí está:
Carta de Jesús Dávila
1 de septiembre 2024
San Juan
Padre Pedro:
Saludos.
Las instrucciones que me dio para que proponga nuevas acciones para promover el libro ‘Enheduanna y Semíramis’ me ha dejado trabado en incertidumbres. Lo más que se me ha ocurrido es que hagamos pública esta conversación. Tal vez, si invitamos a los pocos que se puedan interesar en el tema del periodismo histórico, surjan ideas que generen su propia dinámica para lograr la meta. No se trataría de uno o varios eventos organizados, sino reclutar a quienes estén en condiciones de aportar sus pensamientos, que lo hagan desde dondequiera que estén.
A veces me pregunto de dónde usted saca tanto entusiasmo para mantenerse dando dirección al Proyecto de Periodismo Histórico a la vez que encara con valentía las causas de nuestro país, de nuestro hemisferio, sin dejar de atender los problemas de las comunidades. Digo que a veces me lo pregunto, porque a la larga llego a la misma respuesta. No tengo que tratar de averiguar cómo Dios hace tantas maravillas sino darle gracias por haberme permitido ser testigo de un cura cuya fe no parece tener límites.
Por mi parte, me puedo imaginar que haya, en lugares inesperados, personas que quieran leer el libro, que les llame la atención evaluar si merece la pena promoverlo en centros de estudio. Me puedo imaginar conferencias sobre aspectos del libro o sobre el periodismo histórico. Aún si nadie contesta, el hecho de difundir esta invitación, ya sería una promoción del libro.
De igual forma, podría ser útil si se difunde la grabación de la presentación televisada que se hizo en la librería Casa Norberto en San Juan.
No me preocupa que sean pocos los que tengan interés por la lectura en nuestro tiempo. Por el contrario, lo que me inquieta es que eso se use de excusa para promover que la gente no lea. Se me parece demasiado a cuando se difunde la idea de que la gente no trabaja la tierra y que el progreso de un campesino no es lograr cobrar bien por su trabajo, sino dejar la agricultura para irse a conseguir empleos industriales. Total, para que después andemos penando porque no hay suficiente producción de comida.
Padre, la lectura cambió mi vida. Entre los recuerdos que guardo con cariño de mi infancia está cuando me encerraba, me escondía, en la biblioteca de mamá. Entre los libros para gente grande que leí, puedo referirme a la novela ‘Cauce sin río’, de Enrique Laguerre, y su denuncia, que era algo así: “Objeto que la civilización haya puesto el pie donde debió poner el alma”.
Agradecido,
Jesús Dávila
Hasta aquí la curiosa nota del compañero periodista con la que me acabo de enterar que el primer libro que leyó de manera atrevida fue un clásico de la literatura puertorriqueña. La misma que marcó mi existencia en mis primeros años de estudio.
Sin embargo, deseo añadir que, además, de felicitarle es importante mencionar algo de su trayectoria periodística por la cual recibió el premio.
Jesús Dàvila ha trabajado en The Associated Press, United Press Internacional, CNN, periódico El Reportero, El Nuevo Día de Puerto Rico y El Diario-La Prensa de Nueva York. Se desempeña actualmente como corresponsal de NCM Noticias. Desde hace años promueve lo que se denomina “periodismo histórico” y, en ese género, ha publicado ‘Foxardo 1824 y el bombardeo ritual de Vieques’, ‘El Lenguaje, Género e Historia’ (entregada a la mano al Papa Francisco) y ‘Enheduanna & Semíramis’.
Está gestión la coordinamos a través del Proyecto de Periodismo Histórico, desde donde se ha hecho de las entrevistas al pasado la búsqueda de tesoros y repuestas a temas del presente. Entrevistar al pasado para leer el presente.
Continuamos adelantando la misión del periodismo histórico para el bien de nuestros pueblos.